Reseña La casa de los espíritus de Isabel Allende

 

Isabel Allende, escritora chilena exiliada en Caracas, no ha dejado de escribir desde que publicó esta obra. Para mí, La casa de los espíritus es su única obra reseñable, las demás obras no son muy de mi estilo, y con esta obra ha sido muy criticada ya que acusan a la autora de copiar a Gabriel García Márquez en Cien años de soledad, ya que la trama también sucede en una familia a lo largo de varias generaciones, hay realismo mágico y muchas cosas en común. Lo cierto es que, aunque sea una obra muy similar o haya tomado la idea de Gabo, Isabel Allende aquí, hace algo magistral, nos cuenta los sentimientos profundos de cada personaje, su evolución y una introspección muy personal de cada uno de ellos, lo que lo hace único de su pluma y mano.

Como decía, la novela cuenta la historia a lo largo de 4 generaciones de la familia Trueba, desde principios del siglo XX hasta los años 70, mientras nos movemos en esas fechas, vemos reflejados los movimientos sociales de un país como Chile y los diferentes partidos políticos, los liberales y los conservadores.

Por un lado, el partido conservador es digamos como los partidos de derecha latinoamericanos, frente al partido liberal, que es más de izquierdas.

La mayor parte de la familia será del partido liberal, mientras que el patriarca de la familia, Esteban Trueba, será del partido conservador y veremos en él cómo explota a los obreros y solo le interesa adquirir propiedades y el dinero.

La historia es contada desde varias perspectivas, estos personajes escriben en un diario y es a través de éste, donde vamos descubriendo todo lo acontecido con la familia. El primer narrador es el abuelo Esteban Trueba, el segundo narrador es Alba Trueba, la nieta y hay un tercer narrado que es omnisciente.

Nos cuenta cómo es la vida en la ciudad y también en el campo, la villa conocida como Las Tres Marías, cómo es allí la vida, la política, el amor, la familia, los fantasmas del pasado, las diferentes clases sociales, la revolución, los ideales y todo ello mezclado con el realismo mágico, es decir, la incorporación de elementos extraños a lo cotidiano.

En definitiva, es una obra que merece mucho la pena leer, también hay una versión cinematográfica de 1993 con Jeremy Irons, Meryl Streep, Glenn Close, Winona Ryder y Antonio Banderas.