Los Canterbury Tales de Chaucer

Los Cuentos de Canterbury es la gran obra de Chaucer y una de las más importantes de la literatura medieval. Son romances, historias de tono irónico y burlesco y también hagiografías, leyendas piadosas y sátira social cuya fuente es el Decamerón de Boccaccio.

Antonio Bravo García añade que:

El tema general que da unidad a la obra se centra en la peregrinación de un grupo de peregrinos que se disponen a partir hacia la tumba de Thomas Beckett en Canterbury, el santo más popular de Inglaterra que había sido asesinado en el siglo XII en la catedral de la ciudad de la que era arzobispo por orden del rey Enrique II. El grupo de peregrinos se encuentra en la taberna llamada “Tabard Inn” en Southwark. A propuesta del ventero Harry Bailey acuerdan tomar la peregrinación como una actividad festiva y el optimista ventero dispone que cada persona debe contar dos relatos a la ida y otros dos a la vuelta. Este plan, que aparece ideado en el Prólogo de la obra, no se lleva a afecto y en realidad aparecen en la narración sólo veinticuatro cuentos. […][1]

En el prólogo se describe con gran precisión como son cada uno de los peregrinos, sus gustos, aficiones, profesiones, vestimenta y creencias de vida. Esto quiere decir que el autor ofrece un perfecto cuadro de la época con los vicios y virtudes de esos momentos. Chaucer se dedicó a observar la sociedad que le rodeaba y se dio cuenta de los múltiples engaños de los clérigos hacia los creyentes y, en general, la falsedad de la iglesia y la corrupción.

Podemos agrupar la obra en varios géneros:

-Cuentos-Romances: muy populares en la Edad Media, el autor se inclina por el romance artúrico con temas clásicos y orientales.

-El lai bretón: de origen celta. Son leyendas aristocráticas recogidas de María de Francia. Leyendas tales como hadas, brujas, monstruos y dragones.

-Los fabliaux: de tema irónico y cómico. Reflejo de una sociedad despreocupada que solo se preocupa de los placeres de la vida.

-La sátira: descripción satírica de los personajes.

-Los cuentos fábula: tipo las fábulas de Esopo, para enseñar a la gente, algunas con animales.

-El género de la consolación: sentimiento trágico de la vida que solo podemos solventar acercándonos a la filosofía cristiana.

-El cuento ejemplar: también conocido como exempla. Se trata de enseñanza moral.

-Hagiografía: vidas de santos.

-Leyendas piadosas: parecidas a las vidas de santos pero los personajes no son santos ya que no han sido canonizados.

-La tragedia: con final trágico, no obra de teatro.

-La crónica: fantasiosas y sin objetividad, lejos de ser crónicas históricas.

-La homilía: sermones tipo ars rethorica.

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[1] Antonio Bravo García, “Chaucer II. Los Canterbury Tales y los géneros literarios” en www.liceus.com